Pero para mí el cambio es mucho más profundo que este de dibujante. El mismo núcleo de la historia se ha desplazado, en parte dejando de lado las raíces más pulp para volcarse cada vez más en el folklore tradicional, dos elementos que en las primeras historias estaban más o menos equilibradas. Comparemos los elementos que componen la primera miniserie del personaje, Semilla de destrucción: nazis, deidades lovecraftianas, demonios, exploración ártica/hiperbórea..., cierto que ya en la segunda miniserie a estos elementos se unen otros, la presencia de Hécate o de Baba Yaga, más mitológicos, pero aún esos elementos pulp continuaban siendo fundamentales. Sería, sobre todo, a partir de la historia titulada El cadaver cuando comienza este giro feérico de la historia. En estos dos últimas miniseries, por otro lado, los elementos principales son las hadas, entendido esto en un sentido amplio y no en el sentido restrictivo que esta palabra suele tener en castellano, y en el último caso la leyenda artúrica. La historia, que sucede fundamentalmente en Inglaterra, peca quizás de alimentarse demasiado de los tópicos de la Merry England, de forma que casi parece situarse en un pasado impreciso más que en plenos años 2000.
La historia sigue los sucesos tras la muerte de Dagda (el último rey de los Tuatha de Dannan), los planes de Morgana y los anuncios de una guerra apocalíptica que, tras tantos años, finalmente se aproxima. Mientras tanto Hellboy, que se ha distanciado de sus antiguos aliados de la AIDP, es convocado por el Club Osiris, una organización de estirados nobles británicos supuestamente dedicada a cazar a los pocos gigantes que siguen rondando las islas, en lo que llaman (evocando la leyenda) Cacerías Salvajes. Las páginas van enlazando elementos de distintos periodos y miniseries anteriores, ofreciendo trasfondo también de algunos personajes que carecían de el, pero en general parece tener cierto aire de transición, de paso obligado para llegar a acontecimientos más importantes. Hay también una, aparentemente, trascendental revelación sobre el pasado de Hellboy y su conexión con la mitología artúrica.
Personalmente soy muy aficionado a leer material sobre mitología, los cuentos de hadas y la leyenda artúrica, todos ellos son temas que me encantan y que resulta interesante ver en un comic. Pero siempre me ha parecido que mezclar ese material con otros elementos del género de terror es muy difícil, sin hacer que unos u otros elementos queden supeditados a los otros y que se pierda la sensación meramente terrorífica y entre en terrenos más propios de la fantasía épica. Mignola lo intenta pero genera una historia con dos texturas muy diferenciadas, cuyo encaje no termina de funcionar.
Desde un punto de vista meramente argumental parece contradecir algunos de los presupuestos de la serie, o al menos complicarlos excesivamente, como lo hacen las explicaciones divergentes sobre el papel de Hellboy en el plan general. Está, es necesario decirlo, mejor escrito que esas primeras miniseries, y parece que efectivamente Mignola tiene ahora un plan para acabar con su historia y con su héroe, un plan al que todo se dirige y que es algo que podíamos dudar anteriormente.
Puntuación: 6/10
Yo leí los dos primeros y me parecio muy bueno. Tambien me di cuenta del dibujo, pues el 1ero que leí de Hellboy fue Los lobos de San Agustín. Por cierto, a mi me gustó la visión de las hadas de Mignola. En castellano, es cierto que la palabra tiene una connotación poco seria, pero según yo leí por allí la concepción que tenemos de las hadas, es producto del romanticismo del S XIX
ResponderEliminaremm vale, loconfieso. No he leido nada de nada de Hellboy. lo poco que se lo conozco por unaamiga de mi novia...
ResponderEliminarWilliamDargates, a mi no es que no me guste la visión de las hadas de Mignola, es que no me convence la yuxtaposición de las hadas con Hellboy y con esos elementos más "pulp" de las primeras historias.
ResponderEliminarPues Deka es una pena, Hellboy mola :)
Pues a mi esta "caceria salvaje" me parece lo mejor que he leido de Hellboy ;-)
ResponderEliminarBueno Adolfo, nunca he dicho que sea una mala miniserie (en realidad como digo me parece que es la mejor escrita de todas) simplemente aunque me gusta la forma (visual y literaria) utilizada, el contenido no termina de ser de mi, reitero mi, gusto.
ResponderEliminarBienvenido
Acabo de terminar "la caceria salvaje" y coincido con Adolfo: me ha dejado más q satisfecho. Creo q Mignola tomó la decisión correcta al entregarle definitivamente los lápices en "la oscuridad llama" a Duncan Fregedo (en mi opinión los otros dibujantes q han pasado por las series han acabado en 1 resultado más o menos desafortunado)..la osadía de pasar del expresionismo minimalista de M.M. al barroco sobrecargado de D.F. ha funcionado a la perfección.
ResponderEliminaren cuanto al guión debo darle razón a Cadvalon. Ahora q por lo visto y leido MM se ha decidido a cerrar el círculo sobre el destino de HB, parece q intenta enlazar y conectar el mayor número de temas tocados anteriormente, y aqui es cuando aparecen incongruencias y cosas q no terminan de funcionar...aún así hay q reconocer q no es tarea fácil y el hombre lo hace lo mejor que puede!! :)
Por otra parte al dejar ya hace tiempo las antiguas historietas más Pulp se echa de menos al bueno de Abe Sapien y su camarilla de detectives frikis..lástima
Finalmente repetir q aún así me ha encantado "la caceria salvaje" y recomendendar ésta y las anteriores obras de HB..
saludos a todos! nos vemos en el ragnarok!! :P
Gerard, para mi la falta de Abe es una de las grandes perdidas, y eso que con su historia "de origen" me terminó pasando algo parecido a lo que comento con este tomo; me gustaba más la idea que yo me había hecho al principio que lo que ha terminado siendo.
ResponderEliminarSobre el dibujo creo que todos estamos de acuerdo que Fegredo es muy bueno, posiblemente la mejor opción tras el mismo Mignola.